Santa Marta: Amiga de Jesús y Modelo de Servicio
Santa Marta es una de las figuras más queridas del Evangelio. Hermana de María y Lázaro, fue una mujer de fe profunda y amorosa hospitalidad. Su historia nos enseña la importancia del servicio, la confianza en Dios y la vida de oración. Es patrona de los hogares, amas de casa, cocineros y hospitalidad cristiana.
Vida de Santa Marta
Amiga y Discípula de Jesús
Santa Marta vivía en Betania, un pueblo cercano a Jerusalén, junto a sus hermanos Lázaro y María. Su hogar era un refugio para Jesús, donde Él encontraba descanso y amistad.
En el Evangelio de Lucas (10, 38-42), encontramos la escena más famosa sobre Marta. Mientras Jesús visitaba su casa, ella se afanaba en los quehaceres domésticos, mientras su hermana María se sentaba a escuchar al Maestro. Marta, agobiada, le pidió a Jesús que le dijera a María que la ayudara, pero Él respondió:
“Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; pero una sola cosa es necesaria. María ha escogido la mejor parte, y no le será quitada.”
Con estas palabras, Jesús no desprecia el trabajo de Marta, sino que la invita a equilibrar el servicio con la oración y la escucha de la Palabra.
Fe en la Resurrección de Lázaro
Otro momento clave de su vida ocurre cuando su hermano Lázaro muere (Juan 11, 1-44). Al recibir a Jesús, Marta le expresa su dolor, pero también su fe:
“Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Pero yo sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.”
Jesús le responde con una de las declaraciones más importantes del Evangelio:
“Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque muera, vivirá.”
Marta cree en la promesa de Cristo, y poco después, es testigo de la resurrección de su hermano.
Santa Marta en la Tradición
Según la tradición, después de la Ascensión de Jesús, Marta, María y Lázaro fueron perseguidos y huyeron a Francia, donde evangelizaron en la región de Provenza. Se dice que Marta vivió en Tarascón, dedicándose a la oración y el servicio a los pobres.
En Francia se le atribuye el milagro de dominar a un temible dragón, conocido como la «Tarasca», con solo la señal de la cruz y agua bendita. Este relato simboliza su poder sobre el mal y su intercesión protectora.
Marta murió en santidad y su tumba se encuentra en la Colegiata de Santa Marta en Tarascón.
Festividad de Santa Marta
La Iglesia celebra a Santa Marta el 29 de julio, recordando su ejemplo de servicio, fe y hospitalidad. En algunos lugares, también se celebra el siguiente domingo, con procesiones y bendiciones especiales para las familias y los hogares.
Oración a Santa Marta
Oh gloriosa Santa Marta, amiga fiel de Jesús y modelo de servicio, enséñanos a trabajar con amor y a confiar plenamente en Dios.
Tú que recibiste a Cristo en tu hogar, ayúdanos a hacer de nuestra casa un lugar de paz y oración. Danos un corazón generoso para servir a los demás y una fe inquebrantable en la resurrección y la vida eterna.
Intercede por nosotros en nuestras necesidades y ayúdanos a encontrar en Jesús nuestra única esperanza.
Santa Marta, patrona de los hogares y del servicio cristiano, ruega por nosotros.
Amén.
